Muchísimas gracias a todos aquellos que hoy, a pesar de las condiciones climatológicas adversas, habéis querido disfrutar del celo de las cabras montesas y de todos los tesoros de la sierra de Francia.
Gracias también a los profesionales del centro de interpretación de los Mares Antiguos de Monsagro, sin duda un lugar mágico y totalmente recomendable.
Esperamos que hayáis disfrutado tanto como nosotros.
Nos veremos muy pronto.